Las personas quienes se someterán a una extirpación de la vesícula biliar temen como sería su vida después de la operación, pero es importante mencionar que es un temor infundado, ya que se puede vivir sin ella. Es necesaria la extirpación es porque esta “enferma”, por lo que los pacientes que padecen enfermedad en la vesícula, aun cuando sigan sin operarse, ya viven sin ella porque ha dejado de funcionar.
Las causas más frecuentes para extraer la vesícula son: la litiasis biliar o cálculos (producen dolor); ‘colecistitis’ que es una infección; e incluso afectar al páncreas (‘pancreatitis’).
¿Pero como es la vida sin la vesícula?
En el momento de la extirpación de la vesícula, el papel de reservorio de bilis lo realiza el colédoco. Se dilata un poco y en general suple perfectamente su ausencia. Nada más extirparla. En las semanas posteriores a la operación el paciente puede sentir un ligero dolor en el lado derecho del abdomen. Esto no es una mala señal, sino que significa que el colédoco se está adaptando a su nueva función.
Con su extirpación no se limita su vida en nada. La adaptación del organismo a la ausencia de vesícula es muy temprana, en tres o cuatro semanas.
¿Que tan cara es la operación?
Una operación programada siempre será mas barata que una de emergencia. Si padece dolor en la zona abdominal o no conoce a los síntomas siempre es recomendable visitar al médico. No hay un costo promedio por operación ya que existen muchos factores a considerar. Lo mas importante, al siguiente día de la operación el paciente estará en condiciones de dejar el hospital por si propio pie. Como resultado, el impacto en las actividades labores del paciente son mínimas, en lo general.
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